¿Has pensado alguna vez a quien escogerías como tu pareja si sólo pudieses escoger a una?. Afortunadamente en el mundillo del baile no tienes que escoger ya que en el social solemos bailar con mucha gente diferente en una misma noche. Además es lo recomendable. Y es que en el baile somos polígamos y ¿en nuestras relaciones de pareja? 🙂
Seguro que ya sabrás que cuanto mayor sea el número de gente que bailes, mayor será tu aprendizaje y probablemente tu disfrute y tu sonrisa. Imagínate por un momento, sólo por un momento, que con una relación de pareja se hiciera lo mismo, te apuesto lo que quieras a que algunas parejas sonreirían más 😉
Y es que cuando bailas con alguien y conectas, es una pasada. Y no es necesario bailar muchas veces para llegar a sentir sensaciones tan bonitas que no se suelen dar con el resto de gente y es que cuando conectas es tan guay. Te dejo algunas de las cosas que te dirán si has encontrado tu pareja ideal, de baile claro:
- Tus sensaciones son buenas. Bailar con el/la siempre es muy agradable, van de la mano la amabilidad, la admiración y la conexión, es decir, los motivos que te invitan a repetir.
- Fluidez al bailar. Vas notando que no te atrancas, ni tropiezas y que cada vez te vas entendiendo mejor, es decir, no es complicado, es agradable y la cosa va rodada.
- Te vas trasformando. No hay ninguno por encima del otro, por demostrar quién baila mejor. Simplemente disfrutas del respeto y la admiración mutua que os tenéis.
- Sabes que te queda mucho por descubrir. Aunque hayas bailado pocas veces sabes que experimentareis muchas noches inolvidables a medida que os vayáis conociendo más ya que la conexión va siendo mayor.
- Compartes los mismos gustos musicales. Si os gustan los mismos estilos musicales, genial, la conexión puede ser muchísimo mayor, ¿hasta dónde?. Pero si no se coincide en alguno predomina el respeto.
- Tu disfrute y comodidad es lo más importante. Sabes que te gusta sentirte bien y que la sencillez y comodidad prevalece sobre la presión y lo complicado. Es muy sencillo y fácil cuando bailas y es tanto o más gratificante una mirada y bailar suave que tres giros y una acrobacia.
- Tienes ganas de sacar lo que llevas dentro. Te vas dando cuenta que puedes probar cualquier cosa y que sale bien, te entiendes a la perfección y ello invita a que quieras sorprenderla/o.
- Sientes que tu baile crece. Has dejado de lado los complejos y las chorradas, te vienes arriba, te desinhibes, te lanzas y das lo mejor de ti.
Si alguna vez has dado con esta persona puedes decir que has encontrado a tu pareja de baile ideal o aquella que te hace sentir lo que es importante al menos para mí. Si aún no has dado con el/la, no desesperes, si sigues bailando poco a poco las encontraras, para ello te recomiendo que bailes mucho más 😉
Imagínate por un momento que esas sensaciones que te producen bailando se dieran también con tu pareja sentimental, vaya tela sería un pleno total ¿verdad?. Imagínate que hay señales que te invitan a cruzar la línea del baile y te piden conocer a una persona. ¿Qué harías? ¿Te atreverías a cruzar la línea?. Yo lo hice hace un tiempo y aunque no hubo coincidencia, siempre llevaré conmigo las intensas sensaciones que nos regalamos, fue muy bonito.
¿Y tú? ¿Has encontrado a tu pareja ideal? ¿y en el baile? 🙂 Estoy seguro de que no te atreves a contárnoslo. Cuéntanos al menos como fue bailando. Cuéntanos quien te toca las maripositas al bailar y así las/os disfrutamos todos, al fin y al cabo en el baile somos polígamos, déjanos un comentario y comparte lo bueno.
Nos vemos en la pista de baile 😉